¿Qué son los Aceites Esenciales?


La Aromaterapia es una disciplina terapéutica que aprovecha las propiedades de los aceites esenciales extraídos de las plantas aromáticas, para restablecer el equilibrio y armonía del cuerpo y de la mente para beneficio de nuestra salud y belleza.

"La esencia es a la planta como el alma es al ser humano".
Dietrich Gumbel.

“La fuerza vital de una planta es algo que no se puede ver ni tocar pero está contenida en su aceite esencial”
“La aromaterapia es una manera muy eficaz de mantenerse sano y se debe utilizar como un tratamiento preventivo, igual que los chinos utilizaban la acupuntura hace siglos”
S. Price.


La aromaterapia se está poniendo de moda, pero no es solo una nueva tendencia. En Europa, donde se practica desde hace 100 años, es ejercida por muchos profesionales de la salud. Se enseña a los estudiantes de medicina en Francia y ya se emplea en hospitales. Cuando oímos hablar por primera vez de aromaterapia, se piensa en fragancias, perfumes y un mundo seductor de la imaginación, magia, fantasía… Pero la aromaterapia consiste fundamentalmente en la utilización de aceites esenciales para curar.
Los aceites esenciales son sustancias volátiles; extractos vegetales altamente concentrados que contienen hormonas, vitaminas, antibióticos y antisépticos.  En cierta forma, los aceites esenciales representan el espíritu, el alma, de las plantas. Son la forma más concentrada de energía herbaria. Muchas plantas producen aceites esenciales, que también son responsables de la fragancia de las mismas.
Son utilizados en cosméticos y farmacopea, así como en perfumería. Su campo de acción es bastante amplio: desde la profunda acción terapéutica a la extrema sutileza de sus perfumes genuinos.
Los aceites esenciales pueden ser administrados internamente en su forma pura o diluidos en alcohol, mezclados con miel o en preparaciones médicas. Se usan asimismo externamente en masajes o inhalaciones. También son ingredientes de numerosos cosméticos y perfumes. Pueden tener efectos puramente alopáticos (en el sentido que pueden actuar como medicinas convencionales) o efectos psíquicos más sutiles como las flores de Bach o las preparaciones homeopáticas. Además tienen efectos psicológicos  y espirituales, que constituyen su uso más tradicional. Por otra parte, son poderosos antisépticos y antibióticos sin efectos colaterales dañinos para el organismo. En muchos casos, la aromaterapia es una excelente alternativa a terapias más agresivas.
Los aceites esenciales son la “quintaesencia” de los alquimistas. Condensan las partes espirituales y vitales de la planta en una forma material. Por lo tanto, actúan a nivel biológico para fortalecer las defensas naturales del organismo y son el medio de una comunicación directa humano-planta en un plano energético y espiritual.
La aromaterapia puede usarse en muchos niveles diferentes. Los aceites esenciales son materiales extremadamente versátiles, son simultáneamente medicamentos y fragancias, pueden curar los males físicos y alcanzar la profundidad de nuestras almas.

Sin embargo, antes de que siga usted leyendo este libro, debemos hacer una advertencia: una vez que entre usted al mundo de las esencias estará expuesto a una de las más deliciosas e inofensivas formas de adicción. Lo más probable es que quiera saber más y más sobre estas increíbles sustancias y el arte de sanar con ellas. Si se permite ser tocado, descubrirá un mundo nuevo que en realidad es muy viejo, un mundo que se explora desde la punta de la nariz hasta el centro del cerebro, un mundo de sutiles sorpresas y delicioso éxtasis.


HISTORIA DE LA AROMATERAPIA.

Desde los tiempos más remotos de la humanidad, los sahumerios aromáticos se han usado en rituales cotidianos y durante las ceremonias religiosas como expresión y recordatorio del mundo espiritual. La fragancia fue entendida como una manifestación de la divinidad en la tierra, una conexión entre los seres humanos y la divinidad, emanación del espíritu en la materia. Desde entonces se buscó la forma de extraer y fijar estas sustancias aromáticas. Recientemente, en el Valle del Indo, se ha encontrado un alambique de arcilla con una antigüedad de 7.000 años.

Egipto es la cuna de la medicina, la farmacopea y la perfumería. 4.000 años A.C.,
preciosas substancias llegaban allí de todas partes: cedro del Líbano, rosas de Siria, nardos, mirra, incienso, láudano y canela de Babilonia, plantas de Etiopía, Somalia, e incluso de Persia y la India. En los templos egipcios pulverizaban, maceraban o sometían a complejos procesos las plantas hasta obtener las sutiles fragancias que se usaban en las ceremonias. Los egipcios daban suma importancia a la salud y a la higiene y estaban absolutamente familiarizados con los efectos de las sustancias aromáticas en el cuerpo y en la psique. Hacia el año 1.500 a.C.,  aparecieron unos escritos, atribuidos a Imhotep, donde se encuentran recetas cercanas a las de la aromaterapia moderna. Las gomorresinas aromáticas eran transformadas por infusión en aceites vegetales, lo que liberaba las esencias, base de preparación de los ungüentos y los vinos medicinales. Muy probablemente también extraían aceites esenciales. El kephi, por ejemplo, un perfume conocido mundialmente, es un antiséptico, un bálsamo y un tranquilizador. También practicaban el arte del masaje y eran reconocidos especialistas en el cuidado de la piel y en cosmetología. Sus productos eran conocidos en todo el mundo civilizado. El embalsamiento es uno de los principales y más asombrosos usos que daban a las plantas aromáticas. Los cuerpos eran llenados de perfumes, resinas y preparaciones fragantes. Es tan fuerte el poder antiséptico de los aceites esenciales que miles de años después los cuerpos se han mantenido bien conservados.



China. Hacia la misma época, el emperador Kiwan Ti, inició el estudio de los aromas en las plantas.
Milenios más tarde se hablaba de hierbas, árboles y especias y ya se aplicaban los principios del Ying y el Yang.

Mesopotamia, desde los años 3,000 A.C. utilizaban, por ejemplo, extractos de rosas, con las cuales se lavaban el rostro, la cabeza e incluso la boca.



Israel. Los hebreos empleaban los aromas, sobre todo en sus ritos religiosos. Se puede leer en la Biblia, Éxodo 1-38. Y Jehová continuó hablando a Moisés, y dijo: “En cuanto a ti, toma para ti los perfumes más selectos: de mirra en gotas cuajadas, quinientas unidades, y de canela aromática la mitad de esa cantidad, doscientas cincuenta unidades, y de cálamo aromático doscientas cincuenta unidades,  y de cassia quinientas unidades, según el siclo del lugar santo, y de aceite de oliva un hin. Entonces tienes que hacer de ellos un santo aceite de unción, un ungüento, una mezcla que sea obra de ungüentario. Ha de ser un santo aceite de unción”. También conocían las virtudes medicinales de las plantas aromáticas y en ocasiones se untaban el cuerpo entero de ungüentos, tanto para curar sus enfermedades, como para elevar sus almas.


Grecia. Los griegos consumían grandes cantidades de sustancias aromáticas naturales y se conocen varias obras exaltando las propiedades de las mismas. En el libro XIII de su “Historia Natural”, Plinio trata de los árboles y vegetales productores de esencias. Hipócrates, padre de la medicina, habla de la utilidad de los baños aromáticos para el tratamiento de las enfermedades femeninas. En Atenas, luchó contra epidemias, particularmente contra la peste, quemando lavanda, romero e hisopo, entre otras plantas aromáticas. Más tarde se desarrolló en Grecia una utilización sistemática de aromas, particularmente en forma de masajes. Teofrasto, discípulo de Platón, es autor de un “Tratado de los aromas”, señala el interés terapéutico de los perfumes y observa los principios fundamentales de la acción de los aceites esenciales sobre los órganos internos.



Los árabes evolucionaron considerablemente la química y las técnicas de destilación. Produjeron muchos perfumes y se les puede adjudicar el título de “fundadores de la aromaterapia”. El famoso doctor Avicena, el “príncipe de los doctores”, produjo el primer aceite esencial puro (rosa) y utilizó ampliamente los aceites esenciales como terapia. Escribió más de cien obras de medicina, entre las que se encuentra “El Canon de la Medicina”, donde hace referencia a numerosos aceites esenciales.

La India es probablemente el único lugar en el mundo donde la tradición nunca se perdió. Hoy en día siguen elaborándose perfumes y ungüentos con fórmulas de hace hasta 10.000 años. La medicina ayurvédica es la forma más antigua conocida de práctica médica y utiliza más de 700 extractos de plantas como la canela, nardo, cilantro, ginebra, mirra, sándalo, acacia, incienso, etc.


La Edad Media en Europa fue una época de barbarie y pérdida de todo tipo de conocimiento. Pero las técnicas antiguas, incluida la medicina, fueron conservadas por los árabes que iniciaron la práctica de la alquimia, que los egipcios atribuían al semidiós Thot o Hermes, razón por la que también se le llama arte hermético a la alquimia. Los procesos de destilación dieron renovado énfasis a al uso de los aromas en perfumería y medicina.


Durante el Renacimiento floreció la producción de elixires, bálsamos, aguas perfumadas, aceites fragantes,  ungüentos medicinales y aplicaciones cosméticas.

En el siglo XIX comenzamos a tener datos de investigaciones científicas sobre aceites esenciales. En Francia, el Dr. Chabernes escribió un libro en 1838 sobre las enormes posibilidades de utilización de los materiales aromáticos.



René Maurice Gattefosé, doctor francés, es reconocido como padre de la aromaterapia moderna. A principios del siglo XX influenciado por intereses sobre la terapia floral, Gattefosé realizaba experimentos en su laboratorio cuando sufrió graves quemaduras en una mano. Instintivamente llevó su mano a un recipiente el cual contenía esencia de lavanda; las quemaduras sanaron milagrosamente, comprobando que su dolor por tal quemadura disminuía considerablemente, no desarrolló infección alguna y obtuvo una estupenda cicatrización. Después usó los aceites esenciales en la I Guerra Mundial (1914-1918), para curar heridas de los soldados. Descubrió que los aceites tardan de 30 minutos a 12 horas en ser totalmente absorbidos por el organismo. Es así como en 1928 aparece el libro "L’ Aromathérapie" en donde Gattefosé dio a conocer su fundamento, altamente científico, basándose en las virtudes antisépticas y curativas de los aceites.


En 1918, M. Cavel investigó el efecto de 35 aceites esenciales sobre cultivos microbianos y descubrió que la mayoría de aceites esenciales tienen propiedades antisépticas. El más efectivo resulto ser el tomillo, demostrando mayor actividad que el fenol.


Marguerite Maury, de origen Austríaco, bioquímica y esteticista enfocada al ramo de la cosmética, fue una de las grandes maestras, desarrolló investigaciones relacionadas con el mundo de la estética y el masaje. Muchas de sus fórmulas se utilizan hasta ahora. Fue la precursora del sistema de aromaterapia anglosajón donde se formaron personas como Robert Tisserand o Shirley Price, quienes en la actualidad marcan las pautas en cuanto a conocimientos, investigación, desarrollo, aplicación y enseñanza de esta terapia.

Jean Valnet, francés médico-militar quien ayudó a curar heridos en la guerra de Indochina. Debido a la escasez de medicamentos se apoyó mucho en los aceites curativos de las plantas. Los resultados fueron tan impresionantes que siguió perfeccionando cada vez más las técnicas. Posterior a la guerra, Valnet utilizó éstas esencias para tratamientos de tuberculosis, diabetes y otras enfermedades, y contribuyo mucho al conocimiento popular.
En los años 60 del siglo pasado, los italianos Gatti,  Cajola y Paolo Rovesti, director del Instituto Derivati Vegetali, investigaron los efectos psicosomáticos de los aceites esenciales y demostraron su efectividad en el tratamiento clínico de la ansiedad y depresión. 
Ya en los años 90, el mundo de la Aromaterapia cambia radicalmente. El aromatólogo Pierre Franchomme junto con el medico Daniel Pénoel publican en 1990 la obra “l¨Aromathérapie exactement”, una obra sin parangón, con gran cantidad de información sobre la química de los aceites esenciales y su aplicaciones terapéuticas.

Robert Tisserand es el fundador de la Organización más importante que estudia e investiga la práctica de la aromaterapia en la actualidad. 


 ¿QUÉ ES LA AROMATERAPIA?

Podríamos decir que la piedra angular de la Aromaterapia es la Naturaleza en sí, expresada en las esencias de flores, hierbas, plantas o cortezas. Es considerada una disciplina dentro de la medicina natural.
Desde el inicio de esta ciencia, muchos hicieron estudios para determinar científicamente la efectividad terapéutica de los aceites esenciales. Así se ha determinado, por ejemplo, su poder germicida porque inhiben ciertas funciones metabólicas de los microorganismos, tales como el crecimiento y la multiplicación, destruyéndolos si la inhibición se prolonga. No hay que olvidar que la mayoría de aceites esenciales son producidos por los mecanismos de defensa de las plantas. Otro de los elementos que se investigaron es el de la resistividad, es decir la resistencia de ciertos compuestos al paso de la electricidad y el calor. Casi todos los aceites esenciales tienen una alta resistividad que se opone a la proliferación de gérmenes. M. Cavel demostró que para esterilizar un pedazo de carne que ha sido bañado en aguas fecales, solo son necesarios 0.7 cc de esencia de tomillo o 2.2 cc de menta.

La aromaterapia se fundamenta en un enfoque holístico, donde la persona es considerada como un todo, físico, emocional, mental y espiritual interrelacionado. El cuerpo humano es una integridad, un todo, y las interacciones que tienen lugar entre el todo, sus partes, y el entorno, son reguladas de acuerdo con un principio de armonía llamado homeostasis. Este es un proceso de autorregulación en el que son fundamentales las secreciones de las glándulas endocrinas, las hormonas. Cualquier agresión externa o problema psicológico, provoca una regulación compensatoria. La ingestión de químicos constituye frecuentemente una agresión. La medicina alopática, basada en la quimioterapia, trata de responder a la agresión con otra agresión, creando un  estado de guerra sumamente perjudicial para el campo de batalla, ¡el cuerpo humano!
Dependemos de las plantas absolutamente para todos los órdenes: alimento, energía y oxígeno. Existe una relación complementaria entre las plantas y los seres humanos, somos una parte del mismo Todo, que es la Vida. Por esto es que las plantas generalmente no son agresivas contra el cuerpo.
Herodoto, el padre de la medicina occidental, basó su práctica en dos principios: el de las similaridades (tratar lo mismo con lo mismo) y el de las oposiciones (encontrar opuestos, antídotos). La base de la alopatía es la búsqueda de antídotos. El principio de similaridad, desarrollado por Paracelso, el gran médico, alquimista y filósofo, requiere de intuición y sutileza y es el principio básico de la homeopatía y, en general, de la medicina natural.

Un sistema viviente (una célula, un organismo, una colonia de insectos o un grupo social), se inicia con ciertas potencialidades que cristalizan por reacción al entorno. Como la vida usa estructuras universales (cromosómicas o enzimáticas), los sistemas pueden “pedir prestada” información a otros sistemas vivientes y hasta pueden incorporar información ajena. Si la clave de la recuperación se encuentra en nosotros mismos, se deduce que es benéfico darle al cuerpo la información correcta cuando no la halla en sí mismo. Es por ello que el tratamiento no debe proyectado sobre una afección determinada, para obtener resultados efectivos y positivos se han de tener en cuenta todas las características de la persona, incluida la información (o desinformación) que su psique está transmitiendo a su cuerpo.
Es evidente que los aceites esenciales juegan un papel clave en la bioquímica de la planta, son como hormonas contenidas en pequeñas bolsitas ubicadas entre las células y que actúan como mensajeros. Catalizan las reacciones químicas, protegen la planta de parásitos y enfermedades, son muy importantes para la fertilización, son agentes de la adaptación de la planta a su entorno y controlan la multiplicación y la renovación de las células. Por esto tienen efectos citofilácticos, curativos y hasta propiedades anticancerígenas (células que reciben información errónea), según Jean Valnet. La antroposofía, desarrollada por Rudolf Steiner en Alemania, dice que los aceites esenciales, producidos por la actividad solar, son manifestaciones del Fuego Cósmico, en ellas la materia se disuelve convirtiéndose en calor y, por lo tanto, están indicadas para enfermedades del cuerpo astral.

La aromaterapia actúa en distintos niveles. Primero existe una acción alopática debida a la composición química de los aceites esenciales y sus propiedades antisépticas, estimulantes, calmantes, anti neurálgicas y otras. Hay una acción más sutil a nivel de información, similar a la acción de los remedios homeopáticos. Finalmente, pero no de menor importancia, actúan sobre nuestros cuerpos sutiles. Dice Marguerite Maury, en su libro El Secreto de la Vida y la Juventud: “El efecto de las fragancias en el estado psíquico y mental del individuo es de gran interés. El poder de la percepción se torna más claro y preciso y surge un sentimiento de haber dejado atrás los acontecimientos o de percibirlos bajo otro prisma. Podría decirse que el problema emocional, que por lo general obscurece nuestra percepción, queda de hecho prácticamente suprimido”.
Recientes investigaciones realizadas en Europa, Estados Unidos y Rusia, revelan que los efectos de los olores en la psique pueden tener mayor importancia que la que los científicos habían supuesto. El sentido del olfato actúa sobre todo a nivel subconsciente, los nervios olfativos están conectados directamente a la parte más primitiva del cerebro, el sistema límbico. En cierto sentido, estos nervios son una extensión del cerebro mismo, la nariz es la única apertura directa al cerebro. El sistema límbico, conocido como rinencéfalo (cerebro que huele), es la parte del cerebro que regula la actividad sensomotora y se relaciona con impulsos primitivos de sexo, hambre y sed. La estimulación del bulbo olfatorio envía señales eléctricas al área del sistema límbico relacionado con los mecanismos viscerales y del comportamiento emocional. La respuesta eléctrica del cerebro a los olores es más o menos la misma que la correlativa a las emociones (en algunas lenguas sentir y oler se dicen con la misma palabra o ambas palabras se pueden intercambiar).
Los procesos de la percepción olfatoria son inconscientes en su mayoría. Por lo general estamos mentalmente al margen de nuestro entorno de fragancias. Por alguna razón, aún no bien explicada, percibimos con intensidad los nuevos olores y al poco tiempo ya no lo captamos. Los signos eléctricos siguen alcanzando el cerebro, pero la conciencia se desconecta. Esto muestra el poco control que tienen nuestros centros de conciencia sobre los estímulos olfatorios.

El sentido del olfato es muy sensible, podemos detectar una parte de material flagrante en 10.000 billones de partes o más. Una nariz entrenada puede distinguir varios cientos de aromas distintos. Sin embargo no tenemos un vocabulario apropiado para hablar de olores porque el nervio olfatorio termina en una parte del cerebro que no usa la misma lógica que nuestros centros intelectuales. La incapacidad de oler, la anosmia, va siempre acompañada por algún elemento de depresión. Con la pérdida del olfato, perdemos también el gusto y la vida se trona insípida e incolora. También es muy interesante la parosmia o ilusión olfatoria (referente por lo general a la percepción de malos olores). Muchas veces, personas tímidas o cohibidas tienden a sentir que los malos olores emanan de ellas mismas, mientras las personas con tendencias paranoicas los perciben como provenientes de otros. 
La actividad sexual está íntimamente relacionada a los aromas. Todos los mamíferos emitimos feronomas a través de glándulas apocrinas productoras de esencias. Especialistas en perfumes hacen notar que la mayoría contienen ingredientes que imitan estos signos sexuales. El almizcle o el sándalo tienen estructuras químicas similares a las feronomas y por esto son considerados afrodisíacos. Las sutiles emanaciones crean una red que nos conecta al subconsciente y a la vida misma.
Las fragancias pueden sacar a la luz las sensaciones más profundas o las más fugaces. Así como la felicidad, el amor o la risa, las fragancias nos toman por sorpresa y se desvanecen cuando tratamos de fijarlas. En un instante de arrobamiento corren a través de todo el cuerpo ondas de deleite ofreciendo imágenes y sensaciones nuevas que son indescriptibles. Las experiencias más fuertes y profundas suelen ser acompañadas por sensaciones olfatorias. Se dice que los místicos experimentan fragancias celestiales y que mueren en olor a santidad.
El sentido del olfato está estrechamente relacionado a la memoria, los recuerdos olfatorios
son muy precisos e inolvidables. Cuando recordamos algo que nos gusta o desagrada, casi siempre hay un olor presente. Algunos psicoanalistas utilizan aromas para traer al presente recuerdos perdidos en la memoria. Puesto que este sentido está tan relacionado al subconsciente, se ha abierto un campo en la psicología, todavía poco estudiado. Un procedimiento empleado con frecuencia por los terapeutas es difundir una mezcla de aceites durante la sesión terapéutica y cada vez se usan más en los centros naturistas para relajar a los pacientes.
Esta importancia del sistema olfativo es lógica y muy necesaria a la supervivencia. Los olores indican el estado de la materia y nos permiten discriminar. Por ejemplo, el olor a podrido nos indica que ese alimento no es apto para el consumo, podemos oler el nerviosismo de un animal o una persona y detectar una intención no declarada o violenta. Es, por lo tanto, básico para la supervivencia porque el olor provoca reacciones inmediatas de defensa a partir del sistema límbico. Pero hay algo más y muy importante: la relación del olfato con la discriminación, con la capacidad de distinguir y de discernir. Decimos que algo “huele mal” cuando nos parece inadecuado o engaño o “esto es flagrante” cuando está muy claro, es decir cuando los códigos de información contenidos en esa materia descompuesta o en esa situación nos parecen dañinos o adecuados. Pero cuando hemos interiorizado el engaño, cuando hemos aceptado los códigos erróneos como ciertos, ya no percibimos el olor, ya no somos conscientes de la enfermedad, de que esos códigos o virus han contaminado nuestro ser. Esta enfermedad del alma y de la mente, se va fijando en los
cuerpos sutiles y de ahí va pasando al cuerpo físico. Entonces tomamos consciencia de que algo está mal. Aquí es donde la respuesta de la medicina es fundamental. Si esta no es holística, ataca las causas pero no sana el origen. Por lo tanto, se puede entender la importancia de los olores esenciales puros en la modificación de los códigos erróneos, limpiando y ayudándonos a regresar al origen, a descubrir la raíz del problema y a sanar.

Es importante señalar que las fragancias han sido utilizadas desde la antigüedad para hacer el bien. Una fragancia no puede ser analizada por ningún método científico, pero puede ser experimentada. Según Goethe, las plantas pasan por una transformación del germen primitivo a la exuberancia de la flor en un movimiento natural hacia la espiritualidad, en el que la flor representa el éxtasis. La fragancia es la manifestación de ese júbilo.


PRINCIPIOS ACTIVOS DE LAS PLANTAS

Durante su desarrollo las plantas producen substancias muy complejas que suelen diferenciarse en principios inmediatos y principios activos.
Los principios inmediatos:Son substancias que no ejercen una actividad farmacológica directa sobre las funciones de la planta, pero le son imprescindibles para conservar su vida. A este grupo de plantas se les llama alimenticias. Contienen prótidos, glúcidos y lípidos.
Los principios activos:Se forman mediante un metabolismo secundario de la planta. Atendiendo a su estructura química se pueden establecer los siguientes grupos de principios activos:

Heterosidos, alcaloides, taninos, derivados, floroglucinicos, materias , grasas, minerales, vitaminas, hidratos de carbono, fécula, fitonocidas, glucoquininas, substancias amargas.


LOS ACEITES ESENCIALES

El término “esencial” fue acuñado por Paracelso. Como doctor sabía de las propiedades curativas de las plantas, decía que las plantas le hablaban y le comunicaban sus propiedades; como alquimista vio la posibilidad de extraer su “quintaesencia”, el espíritu divino contenido en ellas. Su idea es que tanto el ser humano como las plantas son una mezcla de espíritu y materia, que a través de las esencias el ser humano no entraría solo en contacto con la parte física de la planta, también con su parte espiritual y así la sanación sería completa.
 Los aceites esenciales son exhalados por las flores, las plantas y cientos árboles aromáticos y se pueden encontrar en las raíces, el tronco, la corteza, los frutos, las semillas, las hojas o en la flor.
Se elaboran en el citoplasma de la célula vegetal. La síntesis y acumulación del aceite esencial está situada frecuentemente en la proximidad de la superficie de la planta.
Según las especies vegetales estas formaciones están en las células esenciales, pelos secretores, bolsas secretoras y canales secretores.
Son materias vivas y representan la energía vital del vegetal. Este potencial de energía es una condensación de las energías del sol, captadas y transformadas por las plantas a través de un proceso alquímico inimitable e irremplazable.
En los órganos de las plantas donde predomina el desarrollo clorofílico se forman, cuando la asimilación es activo, alcoholes terpénicos, los cuales dan los ésteres por acción de los ácidos o los terpeno por separación del agua. Cuando la asimilación es suprimida por la energía respiratoria, los alcoholes se oxidan y forman cetonas y aldehídos.
Los productos químicos son substancias muertas, por lo tanto peligrosas y perturbadoras de los sistemas metabólicos naturales vitales, ya que se acumulan y actúan en sinergia. Con su presencia, el suelo, las plantas, los animales y el ser humano se desvitalizan.
Por el contrario, los aceites esenciales son productos naturales que, utilizados con fines preventivos, curativos o de bienestar, favorecen una profunda revitalización del organismo.
Pero, lamentablemente, y por múltiples razones, nos es fácil producir verdaderos aceites esenciales de alta calidad. Las dificultades vienen sobre todo de la dificultad de encontrar plantas sanas, porque la recolección de plantas salvajes requiere una gran cantidad de trabajo, porque los cultivos orgánicos son todavía escasos y porque las técnicas adecuadas de destilación no son siempre respetadas.
Hoy en día la utilización de los aceites esenciales con fines medicinales o higiénicos ya no puede obviar los avances en ciencias botánicas, químicas y biológicas y fundamentarse obviando cualquier tipo de mística. Muchas veces son recetadas sin tener en cuenta las realidades botánicas y las grandes diferencias de composición entre variedades de una misma especie. Una aromaterapia científica digna de este nombre, para ser creíble y poder reproducir resultados debe fundamentarse sobre conocimientos botánicos precisos, cuya ausencia abre la puerta a todos los errores y charlatanerías.

COMPOSICIÓN DE LOS ACEITE ESENCIALES.

Un aceite esencial puede componerse de muchas sustancias aisladas. En el caso de los extraídos de las flores son mucho más complejas llegando a tener hasta 1000 componentes. En el caso de los extraídos de las hojas pueden contar con solo uno.
Las esencias de las plantas son estructuras químicamente muy complejas. Utilizando la energía obtenida de la luz del sol, la planta combina los elementos químicos que encuentra en el aire, el suelo y el agua alrededor, como carbono, el oxígeno y el hidrogeno y a partir de estos átomos construye cientos de compuestos químicos diferentes. Estos compuestos químicos se agrupan en ocho categorías principales:
1.    Ácidos
2.    Alcoholes (linalol, geraniol, santalol, cinámico, cumínico, nerol y terpineol).
3.    Aldehídos
4.    Cetonas
5.    Esteres
6.    Fenoles
7.    Sesquiterpenos
8.    Terpenos
Aunque muchos de los constituyentes químicos aparecen en más de una esencia, es la combinación particular de compuestos químicos que aparece en cada planta lo que le da su perfume característico y sus propiedades terapéuticas.
Algunos de los constituyentes de las esencias de las plantas son aislados por los farmacéuticos, que buscan un solo “ingrediente activo” para tratar un solo síntoma.
El compuesto químico puede utilizarse tal cual, o copiarse (sintetizarse) en el laboratorio, pero estos compuestos químicos aislados nunca son tan efectivos, ni carentes de riesgos al utilizarlos solos, como cuando se hallan combinados en la planta de modo natural.
La combinación de compuestos químicos actúa sinérgicamente, impidiendo así efectos laterales indeseables. Incluso cuando una esencia contiene de un 80 a 90 por 100 de un solo compuesto químico puede tener una docena o más de otros constituyentes, algunos presentes tan solo al estado de trazas, y estos equilibran y moderan el efecto del constituyente principal. Esta es la razón por la que los efectos laterales resultan tan raros en aromaterapia y de hecho en toda la medicina con plantas en general.

¿DE DÓNDE SE OBTIENEN LOS ACEITES ESENCIALES?

Son sustancias que se obtienen de un proceso bioquímico producido por las plantas, directamente de las glándulas secretoras. Los aceites que encontramos en las plantas cambian continuamente de composición química y se mueven de un lugar a otro según el movimiento del día, razón por la cual la extracción de los aceites tiene un momento y tiempo específico para optimizar su recolección. Debemos de considerar el momento del día más conveniente, la estación del año y sus condiciones climatológicas.
Podemos encontrar aceites en diferentes partes de la planta: La resina en la mirra,  la corteza en la canela, el espliego en las flores, etc.
Se dice que la personalidad de la planta es revelada por la esencia de la misma: No pueden existir dos plantas con iguales olores.
La mayoría de los aceites esenciales son incoloros, aunque existen los llamados absolutos que se destacan no solo por su color sino también por su densidad.

PRINCIPALES MÉTODOS DE EXTRACCIÓN DE ACEITES ESENCIALES.

Para extraer las substancias aromáticas se utilizan diversos métodos. Es una operación muy delicada, ya que tiene por finalidad extraer los productos más sutiles elaborados por los vegetales, con mucho cuidado para no alterar la calidad. Es suficiente tener en cuenta la rapidez con que se desprende, y luego desaparece, el perfume de una flor, incluso la más aromática, cuando rozamos sus pétalos. Si se rompe la cutícula de las bolsas epidérmicas, la esencia se escapa y billones de partículas se dispersan, se ionizan e interactúan con el vapor de agua, el oxígeno, el ozono, los rayos solares y otros elementos presentes en el ambiente.
Las técnicas de extracción deben enfocarse, aun teniendo en cuenta el coste de la extracción, en resolver lo mejor posible estas dificultades con el fin de obtener extractos de la más alta calidad, es decir los más cercanos posible a la esencia original.
Es importante aclarar que no de todas las plantas se pueden extraer esencias, ya que no todas desprenden perfumes fuertes. Mientras más en la superficie estén las glándulas de las plantas el perfume de éstas será más fuerte.
Por lo tanto no puede usarse un solo método de extracción con todas las plantas.
Se han clasificado 4 métodos:
La destilación, la maceración, la expresión y la extracción con sus sustancias volátiles.

La destilación: Es uno de los más usados en la obtención de esencias. La destilación se puede hacer de dos formas: en agua o en corriente de vapor; estos métodos generalmente se usan para las maderas aromáticas, hierbas y diversas flores

Destilación en agua:
-Se coloca agua y plantas en una caldera.
-Se calienta el agua.

Destilación a vapor:
-Se colocan las plantas en una cuba.
-Colocamos la cuba sobre el vapor.

Para ambos casos:
-Esperamos a que los aceites se volaticen.
-Recogemos el producto obtenido en conductos rodeados de agua fría.
De éste método el aceite se condensa. 

La Maceración: Este método es utilizado en flores muy delicadas. Es en éste método donde debemos aprovechar una de las grandes características de éstas plantas y es la continuidad de seguir emitiendo sus aceites esenciales durante uno o dos días después. Se rocían bastidores con grasa y colocamos las flores, lentamente irán impregnando su aroma, debemos ir cambiando constantemente las flores. Al finalizar este paso obtendremos una pomada perfumada, ésta a su vez la pasamos por alcohol para obtener el aceite.

La Expresión: También conocida como Técnica del Prensado. Se usa para obtener los aceites esenciales cítricos de cáscaras y cortezas.  Podemos mencionar la naranja, mandarina, pomelo, limón, bergamota, etc.  En la actualidad se usan máquinas especializadas que ejercen presión sobre éstos frutos.

Antiguamente se conocían dos métodos: La esfumación y la jabonadura.
En el primero, se sostiene el fruto entre los dedos, se aplasta la corteza con una cuchara grande dentada, en ella se recogía el jugo. Se repite el proceso hasta obtener todo el jugo.
En el método de la jabonadura se exprime la corteza del cítrico contra una esponja y cuando ya está impregnado se exprime recogiendo el contenido en un recipiente.

CLASIFICACIÓN DE LOS ACEITES ESENCIALES
De acuerdo a sus propiedades, los aceites se clasifican en: Florales, cítricos, resinas, tallos y hojas. 

FLORALES 


Las esencias florales son muy recomendadas para combatir el estrés ya que son excelentes regeneradores celulares, combaten también la fatiga mental y emocional. 

En caso de embarazo no es recomendable su uso ya que ayudan a la aparición del ciclo menstrual. 
Pueden ser usados en problemas del órgano reproductor.
Gracias a que estas esencias ayudan a regenerar las células, son muy utilizadas en tratamientos de belleza y en tejidos que hayan sido afectados por quemaduras o heridas.
Podemos mencionar la manzanilla, ylang ylang, lavanda y geranio. 

CÍTRICOS
Éstas son muy reconocidas por sus propiedades antisépticas y frecuentemente se usan para tratar infecciones de cualquier tipo.  Son excelentes desintoxicantes para el organismo; limpian y regulan el apetito, colaboradores en la pérdida de peso. Son usados frecuentemente en los centros de estéticas para combatir la celulitis, eczemas, acné y psoriasis. Entre éstos frutos podemos mencionar la naranja, el limón, bergamota, lima y mandarina. 

RESINAS 

Excelentes rejuvenecedores de la piel, por lo que se recomienda su uso en el tratamiento de estrías y/o pieles muy envejecidas. Pueden ser usados como limpiadores de ambientes.  Las esencias de resinas al ser mezclados con las esencias cítricas son usadas para sanar inflamaciones de la piel. Entre éstos tenemos la mirra y el incienso.

TALLOS
Estas esencias ayudan a suavizar y tonificar la piel. Son estupendos repelentes de insectos. Si las mezclamos con clavos de olor, tomillo y cedro, contribuyen notablemente a la relajación. Entre éstas esencias podemos mencionar romero, menta, eneldo, canela, lavanda y artemisa. 






HOJAS
Muy buenos colaboradores para levantar el ánimo y balancear experiencias traumáticas o de conflictos. De éstas esencias se han obtenido remedios para atacar problemas mentales. No se recomienda su uso en período de embarazo. Entre ellos tenemos: pachuli, menta, romero, albahaca, orégano, hinojo, salvia clara, agujas de pino, mejorana y romero.







FORMA DE CONSERVAR LOS ACEITES ESENCIALES. 

Es de suma importancia la conservación adecuada de los aceites, evitando que estas esencias presenten distintos defectos que los harán inadecuados para su uso. Debemos conservarlos en botellas de vidrio, jamás en recipientes plásticos ya que puede dañar el aceite con tóxicos químicos. Estos recipientes de vidrio deben ser de color oscuro para evitar que la luz solar altere el contenido por oxidificación. Se deben conservar en un lugar fresco porque los aceites son inflamables.  Un aceite bien conservado puede durar años. Si el frasco está mal cerrado la esencia se puede evaporar con mucha facilidad, además que al entrar en contacto con el aire se van modifican sus propiedades básicas.



¿DONDE ADQUIRIR LOS ACEITES ESENCIALES?

Para juzgar la calidad de un aceite, no siempre el parámetro es el precio, pero sí es un buen factor determinante. Es por ello, que es preciso adquirir las esencias en una buena herboristería, farmacias de prestigio o tiendas que se especialicen en productos naturales, incluyendo centros de belleza y estética. 

PRECAUCIONES DE USO. 
Lo más importante a tomar en cuenta es si verdaderamente el aceite es puro o si se encuentra diluido con aceite o alcohol. Cuando los aceites son puros no se deben aplicar directamente sobre la piel, a menos que su terapeuta lo indique, así como la dosis adecuada, ya que pueden producir quemaduras en ella. 



CONSEJOS PARA LA APLICACIÓN Y USO EFECTIVO EN AROMATERAPIA.


A continuación le damos algunos consejos que debe tomar en cuenta al iniciar un tratamiento con aromaterapia:

1. Adquirir los aceites esenciales con un proveedor de confianza.
2. No dejar los frascos al alcance de los niños.
3. En caso de sufrir alergias anteriores al tratamiento, consultar con un médico especialista el uso de éstas esencias. (Esto incluye a todas aquellas personas que sufren de patologías graves y epilepsias). 
4. Evitar el uso interno de éstas esencias si no es bajo tratamiento médico. 
5. Ya que los aceites al ser aplicados en el cuerpo necesitan de un tiempo para penetrar, después de haber aplicado el aceite se deben dejar pasar como mínimo dos horas antes de bañarse o tomar el sol. 
6. Evitar totalmente el contacto con los ojos y las mucosas. 
7. Nunca interrumpir una terapia convencional solo por iniciar con la terapia de aromaterapia, una complementará a la otra (siempre y cuando haya consultado a un médico con anticipación).
8. En caso de embarazo, consultar el cuadro de las esencias prohibidas durante éste período o consultar las indicaciones y posología.

MÉTODOS DE ADMINISTRACIÓN DE ACEITES ESENCIALES.

Entre otros métodos de administración de aceites tenemos: 

-         - Inhalación.
-         - Vaporización.
-         - Baños Aromáticos.
-         - Masajes Terapéuticos.
-         - Aplicación de Compresas.
-        -  Ingestión.


MÉTODO DE INHALACIÓN:
Las esencias son absorbidas a través de los pulmones, y desde los alveolos, éstas se difunden a los capilares circundantes y llegan a la circulación en general. Conocido como uno de los métodos más rápidos y directos. Sirven para combatir las enfermedades de las vías respiratorias. Podemos recurrir a las inhalaciones cuando queremos aliviar rápidamente las náuseas, cefaleas y para relajarse. La gran ventaja de las inhalaciones es que podemos efectuarlas en cualquier lugar y en cualquier momento.
Inhalación directa:
Se deben echar de 3 a 4 gotas en unos 100 ml, elevando las dosis y cantidad de agua si se trata de ambientar una habitación. El método es poner el aceite cuando el agua no este demasiado caliente, para evitar que el A.E se evapore rápidamente e inclinarse sobre el recipiente con una toalla grande que rodee tanto el recipiente como la propia cabeza.
Se debe repetir este tratamiento de 3 a 5 veces al día. Procurar mantener los ojos cerrados durante las inhalaciones para evitar sea irritado por el aceite esencial.
Debe situarse la cara a unos 15cm del agua inhalando lenta y cuidadosamente para poder absorberse el vapor lo más caliente posible si se trata de combatir una enfermedad infecciosa que se afectando a los órganos respiratorios. No deberá prolongarse mucho más de 5 minutos, pues podría provocar inflamación de las mucosas y obstrucción de los conductos.
Las inhalaciones debería ser vigiladas si la persona sufre de fiebre del heno o cualquier tipo de alergia. En estos casos se debería utilizar la inhalación solo durante 30 segundos la primera vez, esperar unas horas e inhalar un minuto e ir progresivamente aumentado hasta 5 minutos, si no provoca reacción adversa, no son aconsejables las inhalaciones para los enfermos de asma. Los niños necesitan supervisión todo el tiempo por el peligro de escaldarse.


Para vaporizaciones ambientales se puede utilizar cualquier tipo de vaporizador o sistema que permita evaporar el agua. Los difusores ultrasónicos de AE tienen la ventaja de que pulverizan el aceite sin calentarlo. En los quemadores por el sistema de vela o lamparilla eléctrica, se llena el recipiente con agua y se echan una docena de gotas de aceite esencial. Otra manera de inhalar aceite es poner unas 6 a 8 gotas en un pañuelo y acercarlo constantemente a la nariz. En congestiones nasales la manera ideal de garantizar la respiración sin problemas durante toda la noche es poner el pañuelo sobre la almohada al lado de la nariz, o echar una gota de menta en una cazuela de agua poniéndolo a hervir.

Algunas condiciones que responden bien a las inhalaciones son:

Disfunción del sistema respiratorio, senos congestionados, dolor de cabeza, garganta, catarro.


MÉTODO DE VAPORIZACIÓN:
Este método es una variación del anterior, también podemos decir que es curativo y muy estimulante. , ya que la aspiración de las esencias se introduce rápidamente en el torrente sanguíneo. Se recomienda el uso de éste método para afecciones relacionadas con el sistema nervioso, especialmente en depresiones, agotamientos, ansiedades, etc. Si padece de dolencias respiratorias como catarros, sinusitis o resfriado éste método será el más apropiado. Para el desarrollo de éste método necesitaremos de difusores de esencias. Los hay que evaporan la esencia por calor, generalmente usando una vela en la parte inferior de un cuenco, pero la combustión elimina parte de los beneficios. Los mejores son los difusores ionizadores que trabajan en frío. Los difusores de esencias también tienen la propiedad de actuar como ambientadores naturales.

Absonción en la piel:
Cuando los aceites se disuelven en un baño o en aceites para masaje, se absorben en la piel por los folículos pilosos hasta los tejidos internos y la sangre.

MÉTODO DE BAÑOS AROMÁTICOS: 

En aromaterapia estos baños pueden usarse como baños completos o limitados a ciertas partes del cuerpo, como por ejemplo: manos y pies. Éstos son excelentes relajantes y contribuyen grandemente en las irregularidades en las extremidades inferiores. De acuerdo al aceite esencial que utilicemos este será relajante o estimulante, debemos elegir cada uno de ellos de acuerdo a nuestras necesidades o preferencias. Éste método actúa de dos formas: 
-          Al meternos en la bañera el agua actúa sobre nuestro organismo absorbiendo este aceite en nuestra piel. 
-          Al igual que en la inhalación las esencias actúan dejándonos un exquisito aroma.
Los aceites esenciales no son solubles al agua por lo tanto debemos saber diluirlos en ella, te daremos a continuación dos formas de poder realizarlo: Añadir al agua media taza de leche, agitarla y luego debemos colocar la esencia que se desea usar. Echar en el agua una o dos cucharadas de aceite vegetal base (puede ser almendra, aguacate, germen de trigo) y luego añadir unas gotas de aceite esencial.
Si el baño es tibio dará por resultado un baño relajante y sedante; si por el contrario el baño es caliente, éste tonificará más sin embargo debes tomar en cuenta que el baño no debe ser excesivamente prolongado ya que de ser así te debilitará.

Recomendación:
Añada los aceites esenciales cuando la bañera esté completamente llena de agua, con el grifo cerrado. Si al rato de estar ya en la bañera siente que el olor se está atenuando, no trate de añadir esencia ya que esto es lo normal, pues su olfato se ha adaptado al olor.
Los baños muy calientes no son adecuados en las mujeres embarazadas, personas con varices o con cardiopatías.

Sugerencias para preparar un baño aromático:
El baño es una de las formas que ayuda a facilitar el funcionamiento normal de la piel ya que a través de los poros y de las glándulas presentes en ella eliminamos todos aquellos tóxicos adquiridos por nuestro metabolismo. Los baños colaboran a una profunda limpieza de la piel y a un excelente momento de relajación. Algunos productos a tomar en cuenta son por ejemplo las sales, emulsiones, perlas, aceites y espumas. Con el agua caliente el aceite hace actuar su aroma natural y sus propiedades curativas y embellecedoras.
Si desea tener un spa desde casa tome nota de los siguientes consejos.

Problemas que responden al baño con aceites esenciales:
Insomnios, tensión nerviosa, disfunciones musculares, problemas de circulación, problemas con la , menstruación, catarro y resfriado, dolor de cabeza, retención de líquidos.

Sugerencias pre-inmersión:
- Exfolie la piel en seco con un cepillo de cerdas suaves.
- No pase el cepillo por los senos y cara.
- Comience por la planta de los pies hasta arriba.
La idea del cepillo de cerdas es estimular la circulación y eliminar todas las células muertas. Hay que poner atención de no lastimar los lunares grandes que tenga en tu cuerpo.

Evitar:
- Ingerir los aceites utilizados.
- Ingerir o utilizar los aceites de alcanfor, clavo de olor, hisopo, mirra, mejorana, albahaca, cedro, romero, enebro y salvia.
- Dejar los aceites esenciales al alcance de los niños.
- Tomar sol después de haberse aplicado esencias de naranja, cedrón, pomelo, bergamota y angélica.
- Exceder la cantidad de esencias ni exceder el tiempo en la bañera.

Dosis y modo de empleo:
- Máximo 10 gotas en total de las combinaciones que más le agraden.
- Si excede las gotas puede irritar su piel, por lo cual le pedimos que preste total cuidado en la cantidad de gotas.
- Para suavizar el agua puede añadir un poco de aceite sin aroma (conocido como aceite básico).


MÉTODO DE MASAJE TERAPÉUTICO.
Es necesario mezclar los AE con una base o aceite portador pues, salvo excepciones que se indican donde se emplean puros, son demasiado concentrados para utilizarlos sobre la piel sin diluir. El porcentaje de aceite esencial a utilizar sobre la base vegetal es del 3 al 5%, siempre que en el apartado de “en mensaje” dentro de la tabla de cada aceite no se indicara otro distinto.
Resulta difícil creer que los aceites absorbidos a través de la piel puedan afectar al organismo entero, pero incluso la medicina “ortodoxa” está llegando ahora a la idea de que algunas substancias son incluso más efectivas cuando se utilizan transcutaneamente.
Entre las diversas formas de incorporar los AE al organismo, recomendamos el masaje como la más efectiva,  en especial sobre la administración interna que no debería hacerse sino bajo la supervisión de un aromaterapeuta.
El masaje estimula la circulación local y esto asegura buenos suministros de oxígeno a los diminutos vasos sanguíneos de las capas internas de la piel. Las células de la dermis necesitan oxígeno para su salud y crecimiento. Mediante un masaje hábil y adecuado se estimulan todas las funciones de los órganos del cuerpo, piel, músculo, nervios, glándulas etc.
En compresión (a masaje) aumenta la circulación y la eliminación de residuos tóxicos por lo que ayuda a combatir la fatiga. La piel, los tejidos profundos y superficiales, se ven todos estimulados a una mayor actividad.
Aunque usted no sea experto en reflexoterapia, no menosprecie un masaje en toda la planta de pie. El efecto reflejo resultará muy positivo para el organismo entero.
Las fricciones ayudan a eliminar el exceso de fluido en el cuerpo y estimular la circulación. A veces pueden descomponer la grasa, los puntos fibrosos engrosados y los nódulos de tensión.
Casi todas las condiciones responden bien al masaje, solo recordar que no hay que dar masaje si hay una infección de cualquier tipo en la piel o si hay una fractura, así como sobre una piel contusionada o abierta Entonces se deberá utilizar compresa.
El masaje debe ser suave sobre tejidos de cicatrización reciente o venas varicosas. Cualquier tipo de masaje, con o sin aceites esenciales, estimulará los capilares que se hallan inmediatamente por debajo de la piel, contribuyendo a la salud de ésta por aumentar el flujo sanguíneo hacia su capa de crecimiento, pero muchos aceites esenciales intensifican este efecto.
El simple auto masaje matinal después del baño con aceites cumple una doble función, por una parte benéfica para la piel y por otra para el buen estado de salud en general.
Es muy importante que le satisfaga el olor de la mezcla. Si no le satisface pruebe añadiéndoles unas gotas de algún cítrico, especialmente la bergamota, o también de alguna madera, si es de su agrado. Los masajes son de gran ayuda al sistema cardiovascular ya que estimulan la circulación sanguínea y linfática para que los nutrientes vitales lleguen a las células y éstas eliminen las toxinas en nuestro cuerpo. Éstos ayudan tanto al aspecto físico como psíquico, ya que por sus propiedades relajantes en el cuerpo y mente, estimula la circulación de la sangre. Son de gran ayuda para disminuir dolores y molestias en determinadas partes del cuerpo y órganos internos.




Los aceites esenciales nunca se aplican directamente sobre la piel.
Antes de aplicar un aceite debemos diluir la esencia en el tipo de aceite base adecuado al tipo de problema que queremos tratar y al tipo de piel.
Para alcanzar un masaje óptimo debemos realizar los siguientes movimientos: Roce, amado y fricción. Antes de aplicarse un masaje es aconsejable preparar su cuerpo, ya sea mediante un pre-masaje de fricción o aplicando calor para abrir los poros de la piel:
Prepare una habitación muy cálida y lo más relajante posible. Utilice luces tenues ya que debe dar la sensación de tranquilidad. La música relajante es un gran colaborador. No olvide perfumar la habitación usando las esencias y un quemador.

 ¿CUÁNDO SON INAPROPIADOS LOS MASAJES?:
En personas con operaciones recientes. Después del baño ya que la piel no absorbe nada durante una hora. Sobre quemaduras, fracturas, irritaciones. En caso de fiebres o dolores de espalda.
ALGUNOS CONSEJOS:
Evite tocarse los ojos después de darse masajes. No se exponga al sol (si en caso ha utilizado aceites cítricos). Realice una prueba anti alérgica: Coloque una gota en el antebrazo y espere. Verifique si ha causado irritación. Si sufre de epilepsia consulte primero a su médico.


MÉTODO DE APLICACIÓN DE COMPRESAS:
También conocidas como aplicaciones locales. 
Las compresas son muy útiles para todas aquellas afecciones en las que no deben de ser masajeadas como dolores musculares (lumbagos), hernias de disco o dolores menstruales. Pueden usarse compresas frías o calientes, dependiendo la necesidad.
Son un modo muy efectivo de utilizar los aceites esenciales para aliviar el dolor y la hinchazón y reducir la inflamación. Las compresas calientes se utilizan ante todo para tratar los dolores de naturaleza crónica, estimula la circulación, abren los poros y alivian el dolor debido a causas internas, como calambres, artritis y gota y las frías para tratar el dolor agudo como primer auxilio para lesiones del tipo de los esguinces, así como para reducir hinchazones y la fiebre.
Una compresa caliente se prepara llenando una palangana con agua tan caliente como podamos resistir cuando introducimos la mano en ella y vertiendo 4 o 5 gotas de aceite esencial en el agua. Dobla un trozo de tela limpia y absorbente en varios pliegues y sumergirlo en el agua de forma que la tela (sabana, toalla, pañuelo) coja lo más posible del aceite esencial que flota sobre la superficie. Escurrir la tela para eliminar el excedente de agua y colocarla de inmediato sobre el área dolorida, cubrirla con un trozo de platico adherente para impedir que empape ropas o sujetarla por medio de vendajes.
La compresa debe cambiarse por otra cuando se haya enfriado hasta la temperatura de la sangre.
Las compresas calientes son útiles para tratar:
Dolores de espalda, fibrositis, dolores reumáticos y artríticos, abcesos, menstruaciones dolorosas, dolores de oídos, dolores de muelas.
Las compresas frías se hacen lo mismo solo que el agua debería estar lo más fría posible si es posible añadirle cubitos de hielo.
Las compresas frías son útiles para tratar:
Dolores de cabeza (aplicadas a la frente o nunca), esguinces, calambres en el codo, heridas abiertas, contusiones, ciertos problemas de la piel y otras afecciones con hinchazón.
Alternar las compresas calientes y frías es muy útil para esguinces y otras afecciones donde no puede darse masaje, comenzando siempre por la caliente y acabando por la fría.
En casos como esguinces, contusiones, heridas, neuralgias, abscesos en una zona pequeña se pueden utilizar ciertos aceites esenciales puros (ver en las tabas de los aceites)
En caso de compresas calientes:
- 1 litro de agua caliente
- 10 ó 15 gotas de aceite esencial.
- Insertar la toalla. Dejarla reposar por un momento y luego escurrir.
- Aplicarla sobre la zona deseada.
- Cuando la compresa pierda el calor repetir el procedimiento.

En caso de compresas frías:
Para la aplicación de éstas lo único que difiere del proceso anterior es que el agua deberá estar muy fría.
Recomendamos su uso en problemas de hematomas, articulaciones y quemaduras.



MÉTODO DE IRRIGACIONES:
Para infecciones vaginales (especialmente la candidiasis) hay que diluirlos antes de utilizarlos sobre el delicado tapiz mucoso de la vagina.
Se diluyen no más de 2 gotas de aceite esencial en una cucharadita de 5ml de vodka, u otra bebida de parecida o superior graduación, añadiendo la mezcla a medio litro de agua hervida y enfriada a temperatura por debajo de la sangre. Se debe utilizar un irrigador apropiado, que se puede adquirir en farmacias y se agita fuerte para obtener una mejor mezcla.
Se aplicara 2 veces al día y por un periodo continuado no mayor de 3 semanas, reiniciando si fuera necesario pasada una semana de descanso.
Algunas condiciones que responden bien a las irrigaciones son: leucorrea, candidiasis, parásitos intestinales.

MÉTODO DE PULVERIZACIONES:
El uso de pulverizaciones de aceites esenciales es muy efectiva si se quiere mantener una habitación libre de mosquitos y los aceites desodorantes como la bergamota limpian el aire de olores indeseables.
Pero el uso más importante de las pulverizaciones está en el tratamiento de las enfermedades infecciosas y en impedir la propagación de las infecciones en las habitaciones de los enfermo y en toda la casa durante las epidemias de gripe, el sarampión, la varicela etc. No solo aceleran la recuperación del paciente, sino ayudan a proteger de la infección a otros miembros de la familia.
Los aceites antivirales o bactericidas más poderosos son los de árbol de té, bergamota, eucalipto, lavanda, clavo, enebro, niauli, cajeput, pino, tomillo, limón y romero.
Utilizar 20 gotas  de A. esencial para 200 ml de agua para perfumar el ambiente o ahuyentar a los insectos. Doblar la dosis para pulverizar en caso de enfermedad o epidemia.
Cuida que los quemadores no sean metálicos o los pulverizadores de plástico, pues se alteran y reaccionan mal al contacto con los aceites esenciales.

MÉTODO DE GÁRGARAS:
Se echarán las gotas prescritas en ½ vaso de agua. Algunas condiciones que responden bien a alas gárgaras son:

Úlceras en la boca, infecciones en las encías, infecciones de la garganta y pérdida de voz. 


REGLAS FUNDAMENTALES DEL USO DE ACEITES ESENCIALES.

REGLA #1: DILUIR LAS ESENCIAS
Los aceites esenciales deben ser diluidos ya que éstos son muy concentrados. Las cantidades adecuadas para ser diluidos dependerán para el uso que desea dárseles a los aceites. 
MEDIDAS CORRESPONDIENTES
UNA CUCHARA
15 ML
UNA CUCHARILLA
5 ML
20 GOTAS
1 ML
40 GOTAS
2 ML

REGLA # 2: MEZCLAR LAS ESENCIAS
Mezclar las esencias no es obligatorio pero puede ser muy útil combinar propiedades. Al mezclar las esencias debes tomar en cuenta:
Conservarlas en botellitas de vidrio y oscuras, bien tapadas.

Colocarles etiqueta con fecha de preparación.

ACEITES ESENCIALES USADOS EN LA COSMÉTICA:

Cada día se descubren nuevas propiedades de los aceites esenciales en cosmética. Son la base fundamental de la cosmética natural y son utilizadas en numerosos productos de belleza. 


ACEITES ESENCIALES UTILIZADOS COMO AMBIENTADORES.

Existen varios tipos de aparatos para difuminar las esencias en el ambiente.
A continuación detallaremos cada uno de ellos:


a) QUEMADOR DE ESENCIAS:
Son los más conocidos en el mercado. Pueden ser elaborados de cerámica o de vidrio. Están formados por una estructura, que posee una abertura en la que se coloca una pequeña vela y en la parte alta se apoya una vasija. La vela y la vasija no deben de tener una distancia excesiva de lo contrario la llama que hace calentar el agua no será suficiente, pero tampoco debe ser muy fuerte ya que provocará hervir el agua.
Algunos consejos:
- El quemador requiere de una atención mínima, por lo cual se dice que es más seguro.
- Controle el agua cada cierto tiempo.
- En caso de que el agua se haya evaporado totalmente apague la fuente de calor y espere a que ésta se enfríe.
- No vierta el agua si la vasija está caliente ya que se puede rajar debido a la temperatura que ésta posee en ese momento.

b) BOTELLA CON SPRAY.

Una forma muy rápida y eficaz de eliminar los malos olores en el ambiente. Simplemente se mezcla el aceite con agua, agitamos bien para que este emulsione, luego pulverizamos 4 ó 5 veces el producto y ya obtenemos el resultado.


c) CHIMENEA.
El método de la chimenea es muy simple, lo primero es que debemos tener una chimenea, claro está o simular una en casa de campo, o en la playa, luego rociamos aceite esencial sobre los troncos a utilizar durante 10 minutos antes de encender el fuego y disfrutamos del exquisito aroma de las esencias.

d) DIFUSORES IONIZADORES ULTRASÓNICOS.

Son muy adecuados porque trabajan en frío y por lo tanto se puede apreciar el aroma como salido de la planta.


USO INTERNO

Siempre recomendamos utilizar cualquier otra vía de administración del AE. En caso de utilizar la vía interna debería hacerse bajo la supervisión de un aromaterapeuta calificado. Está demostrado que los aceites esenciales pueden solucionar muchos problemas de salud al ser ingeridos, pero algunos prestigiosos aromaterapeutas desaconsejan su uso porque todavía no hay estudios suficientes sobre los efectos en el organismo a medio y largo plazo. Hay que añadir que no todas las variedades de una misma planta contienen los mismos componentes, por ejemplo hay mucha diferencia entre la salvia esclarea y la salvia officinalis porque la primera contiene elementos altamente tóxicos para el organismo al ser ingerida. Por lo tanto es imprescindible un adecuado conocimiento botánico para recetar aceites esenciales para la ingestión.

En caso de ingerir, siempre es necesario diluir los aceites esenciales antes de su ingestión.
Los medios en que se diluyen mejor son en aceites vegetales o en alcohol. También se pueden diluir en leche muy cremosa o nata liquida, a la que se puede añadir miel si desea amortiguar el sabor del aceite esencial, siendo siempre preferible en una cucharada de aceite de girasol, oliva, soja, sésamo etc. En cualquier caso se debe emulsionar  en la boca con la saliva.
Únicamente se pueden ingerir los aceites así indicados en las tablas, evitando los no recomendados en el apartado “uso interno” del vademécum.
Salvo que haya otra indicación en el apartado Uso Interno, por norma general se puede ingerir 1 gota, 3 veces al día, después de las comidas.

Puede tratarse por via oral:
Catarro, resfriados, flatulencia indigestión, estreñimiento, diarrea, dolor de cabeza, menstruación dolorosa, cistitis, sistema urinario.
En el caso de ingestión por niños las dosis se limitarán a la mitad o la tercera parte, dependiendo de su peso, y para los aceites de manzanilla , lavanda, mandarina o algún otro indicado expresamente para niños y para uso interno, el niño deberá tener más de 6 años.
En el caso de niños es importante administrar vía oral bajo las indicaciones de un aromaterapeuta.

PRECAUCIONES

EN LOS NIÑOS:
 1. Nunca utilice sobre un niño un aceite esencial sin diluir, exceptuando la lavanda en pequeñas cantidades sobre quemaduras y heridas pequeñas.
2. Diluir siempre los aceites esenciales antes de añadirlos al baño de los niños y evitar que se froten con las manos los ojos después de haberlas impregnado con el aceite que flota en la superficie del agua del baño pues el aceite esencial podría irritar los ojos.
3. Nunca echar más de 4 gotas a un baño para un niño en una bañera de tamaño completo y una sola gota convenientemente diluida si se trata de una bañera de bebes.
4. El porcentaje de AE a diluir sobre aceite portador para uso diario esta entre el 1 y 2%
5. En inhalaciones empezar por unos pocos segundos aumentando hasta 1 minuto o 2 si el niño lo tolera
6. Los aceites que pueden ser empleados sin peligro para los niños son los de manzanilla, mandarina y lavanda, siguiendo las instrucciones dadas anteriormente.

PRECAUCION GENERAL

Dada la pureza de los aceites rogamos se atengan estrictamente a la dosis descrita.
El uso prolongado de los aceites esenciales a dosis elevadas y sin control puede producir intolerancia, gastritis, síndrome febril, diarrea, vómitos y degeneración de los tejidos.
En los primero meses del embarazo es preferible usar los aceites procedentes de flores, cítricos o maderas evitando los procedentes de hojas y de hierbas.

 CALIDAD:
La calidad de los aceites esenciales se puede controlar a través de sus:
Propiedades organolépticas: olor, color y aspecto de los aceites esenciales.
Propiedades físicas: solubilidad en alcohol, temperatura de congelación, temperatura de ebullición densidad, índice de refracción y desviación polarimetría.
Propiedades químicas: se ha de conocer el índice de esteres y el índice de acidez.
Propiedades analíticas: cromatografía en capa fina, cromoespectografía de gases y espectrometría de absorción atómica.
Algunos de los perfumes clásicos y de mayor fama mundial todavía emplean los aceites esenciales como sus principales ingredientes perfumantes, especialmente los formulados en la última parte del siglo XIX y primeros del siglo XX.
Los perfumes de más reciente creación suelen estar perfumados del todo o casi del todo por sustancias sintéticas.
La síntesis de moléculas aromáticas se ha vuelto extremadamente sofisticadas y puede igualar, o al menos aproximarse, a miles de olores de aparición natural. A veces se extraen ciertos constituyentes de diversos aceites esenciales, que son luego reunidos en una combinación diferente.
Ciertos aromas, el de jazmín es uno, nunca han sido sintetizados con éxito. Pero aunque la creación de las partículas aromáticas artificiales pueda ser satisfactoria desde el punto de vista de la perfumería, exceptuando los casos en que la terapia es típicamente olfativa, carecen de aplicación terapéutica, incluso cuando las copias se hacen a partir de diversos aceites esenciales recombinados.
El terapeuta, o cualquiera que desee utilizar los aceites esenciales para favorecer su propia salud, debe estar seguro de que los materiales que utiliza no han sido manipulados de modo alguno.
El mejor modo de asegurarse consistente en comprar de proveedores que conozcan el origen de los aceites que venden, sea porque los importe directamente o porque traten con un importador de reputación que pueda darles las necesarias garantías.

Los aceites minerales, jamás se usan en aromaterapia. Son elaborados a partir de derivados del petróleo (parafinas) tiene una estructura molecular muy grande y no son absorbidos por la piel. Si bien son un excelente lubricante, la sospecha de su efecto cancerígeno, el origen petroquímico y la no absorción no solo de ellos por la piel si no el hecho de que además impiden que se absorban  los aceites esenciales los hace totalmente inadecuados para un tratamiento e aromaterapia.

NOTAS DE OLOR

NOTAS ALTAS O NOTAS DE SALIDA:

Los aceites con esta nota son fuertemente penetrantes, estimulantes, inspiradores y volátiles por naturaleza. El aroma puede durar hasta 24 horas. Sin embargo, su mayor influencia se produce realmente en el primer momento del contacto. Éste es el grupo más potente de los aceites esenciales. Cuando se aplican en la superficie de la piel, el cliente experimenta o bien una sensación de frescor o de calor. Estos aceites esenciales no producen una sensación de tibieza. Como nota general use MENOS gotas de notas altas en la fórmula. No todas las notas altas deben manejarse de esta manera; alguna de las excepciones son el limón y el neroli.

            Esencia                             Efecto                                     Combina bien con
ALBAHACA
Reanima, refresca
Bergamota, geranio
ÁRBOL DEL TÉ
Calor
Cítricos
BERGAMOTA
Reanima, relaja, refresca
Jazmín, lavanda, naranja
CITRONELA


EUCALIPTO
Estimula
Lavanda, pino
LAVANDA
Relaja, refresca

MENTA VERDE
Estimula, enfría
Romero
LEMONGRASS
Tonifica, refresca
Geranio, jazmín, lavanda
LIMÓN
Estimula, refresca
Lavanda, naranja
MENTA PIPERITA
Estimula, enfría
Romero
NAG CHAMPA
Relaja
Rosa, lavanda, tomillo, sándalo.
NARANJA DULCE
Relaja, refresca
Limón, lavanda
NEROLI
Relaja
Limón, lavanda, romero
NIAULI
Calor

PINO


SALVIA
Relaja, calor
Cedro, cítricos, geranio, jazmín, lavanda, incienso, sándalo

NOTAS MEDIAS O NOTAS DEL CORAZÓN:

Son aceites esenciales que deben constituir el grueso de la fórmula. La intensidad de su olor se asemeja a la de las notas altas, estos aromas pueden durar hasta tres días. En las fórmulas éstos actúan como ecualizadores, ya que son capaces de controlar la intensidad o la mayor actividad de los aceites esenciales, éstos tienen fragancias que realmente gustan a la gente y, por lo tanto, a menudo constituyen hasta el 50 % de la fórmula.

ANÍS
Reanima, refresca

CANELA
Relaja, calor

CAJEPUT
Calor

CLAVO
Relaja, calor

GERANIO
Relaja, refresca
Albahaca, cítricos, rosa.
JAZMÍN
Relaja, calor
Todos los aceites.
LAVANDA
Relaja, refresca
Salvia, cítricos, pachuli, pino, etc
MANZANILLA
Relaja, refresca
Geranio, lavanda, pachuli, rosa.
MELISA
Reanima, refresca
Geranio, lavanda, naranja, ylang.
PINO
Estimula, refresca

NEROLI
Relaja

ORÉGANO
Relaja, calor

PALMAROSA


ROMERO
Estimula, refresca
Albahaca, cedro, cítricos, lavanda, menta.
SALVIA


TOMILLO


VAINILLA
Relaja, refresca
Lavanda, cedro, jazmín, cítricos.
YLANG YLANG
Relaja
Jazmín, sándalo

NOTAS BAJAS O NOTAS BASES:

Las notas bases producen una impresión más duradera, ya que sus aromas pueden durar hasta una semana. En la fórmula, la penetración y la intensidad de las notas bases hacen más profunda y enriquecedora la mezcla. Muchos aceites de ésta categoría tienen la capacidad de penetrar en la piel mucho más profundamente que todos los demás. En el momento del contacto inicial con la nariz, puede que el aroma no sea particularmente intenso, pero si se deja en la piel puede alcanzar un olor muy fuerte.


CALÉNDULA
Reanima, refresca
Lavanda, limón
CEDRO
Relaja
Bergamota, ciprés. Enebro, jazmín, naranja, romero.
CAJEPUT
Calor

MIRRA
Tonifica, enfría
Lavanda
INCIENSO
Relaja, calor
Albahaca, cítricos, geranio, lavanda, pino y sándalo.
PACHULI
Relaja, calor
Bergamora, geranio, lavanda, mirra, naranja, pino y rosa.
ROSA
Relaja
Salvia, bergamota, geranio, jazmín, pachuli y sándalo.
SÁNDALO
Relaja
Naranja, ciprés, ylang ylang.



1 comentarios:

  1. me ha encantado este escrito sobre los aceites esenciales!!!!!!!!!!!!!!!

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